Profesional avalada por una amplia trayectoria en el mundo del tatuaje

Arcos tatuajes

¡Hoy toca repartir corazones!

Las cosas que SÍ me encantan de mis clientes (sí, también hay muchas)

¡Hola, hola!
Soy Ana, la tatuadora realista black and grey y a color de Arcos Tattoo (en Ermua, Vizcaya), y si ya leíste uno de mis anteriores artículos sobre las cosas que me sacan de quicio como tatuadora, sabrás que me gusta decir las cosas como son… ¡pero también me gusta reconocer lo bueno!

Porque sí, tengo que admitirlo: hay muchas cosas que me flipan de mis clientes. Gente maja, con buenas ideas, con energía bonita… Así que hoy toca repartir corazones y contar esas cosas que me hacen sonreír cada vez que alguien cruza la puerta del estudio. ¿Vamos a ello?


🫶 Cuando confían en mí como artista

De verdad, esto no tiene precio. Cuando un cliente viene con una idea general, me da libertad creativa y me dice: «haz lo que veas, confío en ti», siento que me ha tocado la lotería del tattoo.

Poder diseñar sin estar atada a una imagen de Pinterest o a algo que ha visto su cuñado en Instagram… es magia. Gracias por confiar en mí, por dejarme hacer lo que mejor sé hacer y por creer que tu piel es el mejor lienzo para ello. ¡Sois oro!


💡 Cuando vienen con ideas originales (o al menos personales)

No hace falta inventar la rueda. Pero cuando alguien te cuenta una historia detrás del tatuaje, un recuerdo, un homenaje, una ilusión… todo cambia.

Me encanta cuando un cliente viene con una idea que de verdad significa algo para él o ella. Porque ahí es cuando el tatuaje deja de ser solo tinta y pasa a ser una parte de su historia. ¡Y que yo pueda formar parte de eso es un privilegio!


🧃 Cuando se traen algo para picar… ¡para mí también!

Vale, esto no es obligatorio, ¡pero vaya si se agradece! Si alguna vez me has traído un cafecito, una coca-cola, unas galletas o incluso una empanada (sí, ha pasado)… que sepas que tienes un rincón especial en mi corazón tatuado.

Tatúo con más alegría, no voy a mentir. 😋


😅 Cuando no se quejan cada cinco minutos

Sí, ya sé que los tatuajes a veces duelen. Pero hay clientes que se lo toman con humor, con filosofía, que respiran hondo y dicen: “¡Venga, seguimos!”. ¡Bravo!

Y no, no hace falta ser un robot sin sentimientos. Pero agradezco muchísimo cuando alguien intenta hacer mi trabajo más llevadero sin drama, sin telenovela, sin banda sonora de gritos. ¡Eso también es arte!


💬 Cuando me hacen reír

Hay sesiones largas que se pasan volando porque entre aguja y aguja tenemos conversaciones geniales. Gente divertida, con historias curiosas, con chispa… ¡me dais la vida!

Si alguna vez te he dicho: «tía, podrías montar un monólogo con eso», es porque de verdad me habéis hecho llorar de la risa mientras trabajaba. ¡Y eso no se olvida!


🎯 Cuando llegan puntuales (¡milagro!)

No es por meter presión… ¡pero cuando alguien llega a la hora, me emociona más que el último capítulo de mi serie favorita!

Llegar puntual demuestra respeto por mi trabajo, por tu cita y por el resto de personas que están esperando. Así que si eres de los que llega 5 minutos antes y con todo preparado: gracias, gracias y mil veces gracias.


💸 Cuando valoran lo que vale un tatuaje

No soy una impresora. Y no, no cobro por horas porque sí. Detrás de cada tatuaje hay años de práctica, materiales de calidad, diseño personalizado y mucha, mucha dedicación.

Cuando un cliente no discute el precio, no regatea, no dice “pues me lo hacían por la mitad”, sino que dice “quiero tatuarme contigo porque me gusta tu trabajo”, me emociona. Y me dan más ganas aún de darlo todo.


📸 Cuando me etiquetan en redes y comparten el tatuaje

Una vez terminado el tattoo, me encanta ver cómo lo lucís por el mundo. Cuando subís una foto y me etiquetáis, me ayudáis a llegar a más gente y a seguir viviendo de esto que me apasiona. ¡Gracias por compartirlo y por recomendarme!


🖤 En resumen…

Tatuar no es solo clavar agujas. Es conectar con personas, entender sus ideas, acompañarles en un proceso que a veces es físico, pero también emocional. Y cuando esa conexión fluye… ¡es una maravilla!

Así que gracias a todos los que hacéis que mi trabajo como tatuadora sea algo más que un oficio. A quienes traéis buena energía, respeto y confianza: ¡sois la razón por la que sigo amando este trabajo!

Nos vemos en Arcos Tattoo, ¿no?

—Ana 🖤
Tatuadora en Ermua (Vizcaya), especialista en realismo black and grey y a color

Post a Comment

*