Compartir algo más que tinta
Tatuarse en pareja o entre amigos: compartir algo más que tinta Hay tatuajes que van mucho más allá de la estética. Son una forma de celebrar vínculos, de recordar momentos o simplemente de decir “esto lo comparto contigo”.En el estudio, muchas veces recibimos a parejas, amigos o familiares que quieren hacerse tatuajes a juego o con un significado común. Y, sinceramente, me encanta ver la conexión que se crea en ese momento. No todos los tatuajes compartidos son idénticos. A veces uno lleva una parte del diseño y el otro la complementa. En otras ocasiones, ambos comparten el mismo símbolo pero adaptado a su estilo o personalidad. Lo bonito es que cada caso es único, y ahí está la magia. Ideas que funcionan bien para tatuajes compartidos Hay muchas formas de representar un lazo especial: Símbolos complementarios: sol y luna, llave y candado, corazón partido, piezas de puzzle
Lo que nunca se ve en Instagram
Lo que nunca se ve en Instagram: el trabajo invisible detrás de cada tatuaje Cuando alguien ve una foto en mi Instagram, suele quedarse con el resultado: el tatuaje terminado, la piel limpia, el contraste perfecto, el encuadre cuidado… Pero lo que casi nadie imagina es todo lo que hay detrás de esa imagen.Porque tatuar no es solo “dibujar bien”: es planificar, estudiar, corregir, probar y dedicar muchas horas a cada pieza, incluso antes de que el cliente entre por la puerta. 🎨 La parte invisible del proceso Antes de encender la máquina, hay muchas decisiones que no se ven:buscar referencias, adaptar el diseño al cuerpo, probar medidas, estudiar el tono de piel, las sombras y cómo se comportará la tinta con el tiempo.Cada cliente es distinto, y eso significa que cada tatuaje exige un planteamiento único. Hay días en los que paso horas afinando un detalle en el iPad o rehaciendo un boceto una y otra vez, solo para que el resultado final tenga el equilibrio justo entre arte y técnica. 🧩 El trabajo mental (sí, también es agotador) Tatuar cansa físicamente, pero lo que realmente agota es la concentración.Pasar cinco, seis o más horas completamente enfocada en un tatuaje requiere energía, control y una